Agua fría y recuperación muscular

Ducha-post-entrenamiento-700x500Entre mis pacientes, tengo el privilegio de atender a verdaderos “locos” del deporte. Suelen ser varones, que necesitan su partido o actividad "machacona", tanto como necesitan el oxigeno para respirar. Lo suelen llamar su “vicio”. Sea al mediodía, después del trabajo por la tarde o los fines de semana necesitan desahogarse moviendo el esqueleto y llevándolo al límite sin calentamiento, ni vuelta a la calma. Día tras día siguen estresando su musculatura sin darle el “caramelito” (recuperación) de recompensa. Y tarde o temprano, llega la Lesión. Da igual las recomendaciones que les dé sobre alimentación, hidratación, tiempo de recuperación entre 2 sesiones, calentamiento y vuelta a la calma etc. No las aplican, ni después de lesionarse y tener que renunciar un par de semana a su actividad predilecta. Quizás lo que viene a continuación sea tan fácil de aplicar que, por fin, hagan algo positivo para su musculatura y lo integren en sus buenos hábitos.Hoy en día, muchos deportistas de elite recurren a baños de agua fría, al menos hasta la cintura, después de entrenamientos o competiciones extenuantes para acelerar la recuperación.Los baños y duchas con agua fría tienen un impacto rápido y beneficioso sobre la circulación sanguínea aumentando la llegada masiva de oxigeno a los diferentes órganos y tejidos. La vasoconstricción (reducción del diámetro de los capilares y venas) ayuda a disminuir las micro- inflamaciones causadas por la actividad y permite que tu organismo drene y elimine más fácilmente las toxinas y otros desechos producidos durante el ejercicio intenso.Sin llegar a llenar la bañera de hielo y agua, se puede adoptar el método del agua fría después del partido o entrenamiento, en casa o en el vestuario del gimnasio: en la ducha y en 5 minutos.Para ello es recomendable empezar con agua caliente e ir bajando progresivamente la temperatura del agua, subiendo por los brazos, torso por delante y acabando dejando correr el agua desde el cuello por la espalda. (2’) Enjabonarse. Y aclararse (3’). Y ya está. Obviamente, si en tu gimnasio hay pileta de agua fría, utilízala. Y si vives cerca del mar, pégate un baño después de correr o de montar en bici.Para el resto de los humanos (no locos del deporte) también nos conviene, de vez en cuando, una ducha o un baño con agua fría. Al mejorar la circulación, mejoran también otros aspectos:- Piel más tersa y luminosa.- Antidepresivo natural.- Cabello más fuerte y sano. Prevención de la alopecia.- Mayor energía.- Estimula la pérdida de peso.- Influye en fertilidad.

Anterior
Anterior

Aprende a meditar

Siguiente
Siguiente

La vuelta a la calma