Piernas cansadas. Soluciones

Como vimos en el post anterior, las piernas cansadas pueden tener causas muy variables. Hoy me centraré en daros algunas que otras soluciones para mejorar este aspecto. Las piernas cansadas pueden cursar con dolores, calor, hormigueos y espasmos a la hora de conciliar el sueño. De allí la importancia de paliar lo antes posibles los efectos de la mala circulación y su impacto sobre nuestra salud y bienestar general.Ejercicios físicos recomendables. Antes que llegue el calor y la humedad veraniegos, podrías proponerte algún tipo de rutina para mejorar la circulación sanguínea y linfática de tus piernas.

• En la mayoría de los ensayos sobre cómo activar y mejorar el retorno venoso y el linfático de las piernas encontrarás los siguientes consejos: realizar ejercicios físicos de baja intensidad, bajo impacto sobre el suelo y de larga duración (más de 30 minutos): caminar, montar en bicicleta, nadar, subir escalera, etc. Y estoy totalmente de conforme con ello. Es más si tu actividad profesional te deja clavado sobre una silla durante horas, o al revés de pie y no puedes dedicar los 30 minutos seguidos, es muy efectivo andar unos 10 minutos rápidamente varias veces a lo largo de la jornada. Evita a toda costa caminar sobre aceras calientes, ya que el calor que desprenden provoca el efecto contrario al deseado con la marcha.
• Es conveniente, mientras estás delante del ordenador, no cruzar las piernas y mover los tobillos (flexión-extensión; círculos; puntillas) para activar el retorno venoso a menudo
• En casa o en el gimnasio, plantéate hacer ejercicios tumbado en el suelo y moviendo las piernas en alto (bicicleta, movilización de tobillos, doblar y estirar etc.)
• Aunque no lo encuentres en ningún escrito al respecto, es muy beneficioso para el correcto funcionamiento de tus venas, incluir ejercicios de refuerzo muscular de las piernas, obviamente sin impactos (nada de salto ni correr). La musculación de las piernas mantienen la efectividad de los componentes anatómicos internos de las venas. Podrías 2 o 3 veces por semana hacer series de 10 a 20 repeticiones de ½ sentadillas o sentadillas, pasos largos (lounges) etc.
• Cambios alimentarios. Prefiere alimentos ricos en fibras, con alto contenido en minerales y oligoelementos. Reduce el consumo de sal y azúcar. Bebe agua e infusiones que mejoran la eliminación de toxina y previenen la retención de líquido, evita los refrescos, alcohol, café, té.

Dedica 20 minutos a poner las piernas en alto (contra la pared) cuando acabes la jornada. Duerme con las piernas elevadas unos 10 cm por encima del corazón (coloca un cojín debajo a los pies del colchón)Pon los pies en agua muy fría al llegar a casa (agua con unos cubitos de hielo). Acaba la ducha con agua fría en las pantorrillas.Siendo el estrés una de las causas principal de la mala circulación es primordial relajarte.

• Respira profundamente, así liberas el exceso de tensión y es imprescindible para la fisiología del sistema circulatorio: mejor circulación, oxigenación y eliminación de toxinas.
• Te pueden beneficiar la meditación y actividades como el yoga y/o el tai chi.
• Pero lo que mejor resultado en caso de padecer mala circulación son las terapias manuales como el masaje circulatorio, el Drenaje Linfático Manual, el masaje del tejido conjuntivo. Además de ser relajantes y acelerar la eliminación de toxinas y líquidos, cada técnica actúa específicamente sobre la circulación (consulta sus beneficios en los post dedicados a estas terapias). Estas 3 técnicas tienen en común, que no sólo actúan en el momento de su aplicación, sino que su efecto se prolonga en el tiempo. De esta forma actúan a largo plazo y el tratamiento regular impacta positivamente sobre la dilatación de las piernas cuando llega el calor, los edemas en tobillos y la aparición de las incómodas y dolorosas varices.

Este año, en tus manos está renunciar al cansancio causado por una mala circulación.