Posturas Saludables I - Caminando
No hace falta ser un deportista para tener contracturas y muchas de ellas se podrían evitar simplemente dándote cuenta de cómo vas durante el día.Si te acuerdas en algún momento fíjate que la mayoría del tiempo vas andando con la cabeza metida entre los hombres y ligeramente inclinada hacia delante como si tuvieras que defenderte de algo. Esa forma de moverte por la vida refleja cierto grado de estrés y hace que tus trapecios estén siempre en tensión. Y si te fijas un poco más verás que al mismo tiempo sueles apretar la mandíbula.¡Buena noticia! Si te has dado cuenta puedes corregirlo en un instante. No hace falta cambiar de lugar ni hacer gran cosa. Sólo con tomar conciencia de ello tiene la mitad del trabajo hecho. Ahora decide bajar los hombros, levantar la mirada a la horizontal y suelta la barbilla. ¡Qué bien! Has conseguido un poco de relajación y desengancharte del estrés un segundo. Si puedes ser consciente varias veces al día quizás consigas retrasar estos dolores de cuello y de cabeza que te amargan el día.¡Ánimo. Tú sí que puedes hacer algo para tu bien estar!